Me sentí algo tonta, lo que no es novedad, claro. En realidad, esto de sentirme tonta me pasa dos o tres veces por día, o tal vez cuatro o más. Como sea, creo que hace rato necesitaba volver acá, volver a las raíces. Volver a escribir un poco. Y cuál nena caprichosa lo quise "ya". Tragate tus caprichos y empezá a pensar "¿por qué carajo tengo una memoria de mierda?" Sí querida Josefina, te haz olvidado tu propia contraseña (de nuevo). La cosa es que me gana la bronca que me produce no acordarme mi contraseña, a hacer el trámite correspondiente para los boludos como yo, restablecerla, y listo se acabó el drama, "chau-chau, adiós". Cosas que pasan después de días de creer que tarde o temprano me iba a acordar, me rendí. Me rendí como en muchos aspectos de mi vida. Obviamente, esta vez es una boludez ¿no? Así que reestablecí la contraseña, el estupido blog me gano, mi estupida falta de memoria me gano. Y bueno, aquí me tienen, de nuevo (y tristemente repito, no sé con quién estoy hablando). Lo curioso es que, hoy no tengo ganas de escribir. El día esta hermoso, o por lo menos esta hermoso para mí. Es uno de esos días de viento y de alguna que otra llovizna generosa. De esos días que te dan ganas de cargar tu Cd preferido en tu celular, mp3, mp4, y demás aparatos tecnológicos (creanme para lo único que creo que son realmente útiles es para reproducir música) y salir a caminar - o correr- y sumergirte en el hermoso cliché de caminar bajo la lluvia y sumergirte en el hermoso cliché de pisar charquitos. Y para aquellos que se permiten enamorarse, ¿por qué no? Sumergirse en el hermoso cliché de caminar bajo la lluvia pero acompañados y tomados de la mano.
Sinceramente yo prefiero la música como compañía pero... allá ustedes.
Datos personales
- Josephine.
- Ciclotímica, crisis existenciales berretas, maniática, neurosis controladora, terca como mula, sumamente orgullosa, excentricidad alta y en progreso. Manipuladora, compradora compulsiva de boludeces, nivel incrementado de energía, actividad, e inquietud. Optimista, consumidora masiva de café y pastillas. Amante del cine, el teatro y la buena música. Miedo al fracaso, miedo al abandono, tendencias a escribir más de lo que debo. Fascinación por las gafas, las buenas fotografías y las personas con sonrisas lindas. Algo freak, algo nerd y media concheta. Ansiosa, organizadora de vidas ajenas, bastante despreocupada y en muchos casos depresiva al mejor estilo “drama queen”. Pequeño grado de autismo en la luna. En fin, una trastornada más. Welcome to the Josephine’s life.