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Ciclotímica, crisis existenciales berretas, maniática, neurosis controladora, terca como mula, sumamente orgullosa, excentricidad alta y en progreso. Manipuladora, compradora compulsiva de boludeces, nivel incrementado de energía, actividad, e inquietud. Optimista, consumidora masiva de café y pastillas. Amante del cine, el teatro y la buena música. Miedo al fracaso, miedo al abandono, tendencias a escribir más de lo que debo. Fascinación por las gafas, las buenas fotografías y las personas con sonrisas lindas. Algo freak, algo nerd y media concheta. Ansiosa, organizadora de vidas ajenas, bastante despreocupada y en muchos casos depresiva al mejor estilo “drama queen”. Pequeño grado de autismo en la luna. En fin, una trastornada más. Welcome to the Josephine’s life.

¿Me queres seguir?

23/3/09

Los adictos al sexo y la loca temática.

“Josefina, sos rara”, eso me dijo mi Mamá ayer por la noche cuando le contaba los proyectos que tenía en mente para unas cosas de poca importancia. La cuestión es que horas después de esa conversación, en mi cabeza seguían resonando esas palabras: “Josefina, sos rara”, “rara”. ¿Soy rara? ¿Quién establece el límite entre la rareza y la normalidad? ¿Existe lo normal? Supongo que sí, pero yo no entro en ese grupo. Tal vez las palabras de Laly (mi querida madre), me clasifiquen justa y específicamente, ahora que lo pienso bien, siempre me siento aislada en ciertas conversaciones con amigos. Tengo intereses distintos, tiempos distintos, súper distintos. La mayoría de mis amigos se pasean entre las edades de diecisiete, dieciocho, diecinueve y hasta veinte, mientras que yo tengo mentalidad de señora de cuarenta y siete años, y soy una simple adolescente que va por la mitad de sus dieciséis. Perdón. ¿Dije simple? Me equivoque, debería haber dicho compleja, complicada o lo que sea, nunca simple. Soy complicada y difícil de sobrellevar. El punto es que mientras mis amigos disfrutan de conocer extraños y entablar relaciones a largo plazo, yo me entretengo más leyendo un libro o saliendo a caminar por la ciudad con el MP4 a todo volumen. Mientras ellos se interesan en tener sexo con Fulanito (sin importar cuanto hace que lo conocen) y una semana después comerse las uñas mientras cuentas los días porque no les dan los números, yo prefiero hacer otro tipo de cosas.Mientras a ellos los seduce un par de músculos salidos de un gimnasio o de unas cuantas pastillas que parecen que carcomen el coeficiente intelectual a medida que son consumidas, a mi, me seduce la inteligencia de un hombre y me seduce, y me seduce mucho. Mientras ellos escuchan Reggaeton, para mí es un insulto que ese tipo de música empiece con “Reggae” ya que amo al Reggae casi tanto como al Rock y además debería llamarse claramente “SEXOton”, después de todo ¿qué diferencia hay? La ropa, claro, pero fuera de ese detalle It’s the same. Tengo millones de desacuerdos, uno que jamás voy a terminar de entender es estar con alguien que no conoces previamente, en un boliche. A mí me puede bolar la cabeza un flaco, y si no lo conozco un simple hola se convierte en un simpático adiós o, como en la mayoría de los casos, termino hablando de música o cualquier tipo de banalidades. Soy diferente a casi todos mis amigos, y digo casi por que hay dos o tres que comparten mis opiniones y piensan relativamente como yo, algunos no todos, por supuesto. Y aunque mis intereses no sean los mismos, paso todas mis mañanas, tardes y noches con ellos. Los amo incondicionalmente, no los juzgo, son mis amigos, odiaría tener su vida y que me gusten las mismas cosas. No soy “nerd”, es más salgo casi todos los fin de semanas, porque si no lo hago a esta edad ¿Cuándo lo voy a hacer?. Quizás me gane el premio a Miss Rarita 2009 con esta entrada, los que me vienen leyendo sabrán que digo lo que pienso y no me importa si piensan mal, bienvenidas sean sus opiniones, sus ideas, sus desacuerdos. Pero para dar por terminada esta entrada déjenme decirles lo siguiente: ¡Viva lo Raro y las palabras de Laly que me hacen escribir nuevamente!